octubre 19, 2020

Hay música. Segundos que discurren como las palabras de un poema. Un nocturno de ecos de las cosas que no fueron durante el día. La esperanza que no claudica. Mis piernas cansadas. Una sonrisa que se pinta en mi boca, y a veces cala hasta la base de mi pecho. Una... Quizás cien historias. Una gata que no sabe de maneras, ni de estar lejos de mí. Hay música. Hay una idea de lo que mañana puede ser. Hay una sensación de final, en la penumbra de la noche. Un rincón donde se escribe el mundo. Un beso que nunca fue. Los pensamientos de mi cabeza que te rondan, que te hablan en las horas distantes en las que estoy aún más lejos de ti. Hay un eco de palabras que abandonaron tus labios. La vibración de lo que produjeron en mí... El rastro indeleble de encontrarte, sin haberte hallado aún. Hay un plan. Hay esperanza. Hay destino... Pero sobre todo, hay música. Música para llenar dos almas. Hay un refugio. Hay un lugar para ti y para mi.

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